Nueva colección de revestimientos cerámicos

Esta colección representa una síntesis esencial de estética y calidad de materiales, una constante evolución de los travertinos cerámicos, escogidos entre algunos de los más raros y nobles de la naturaleza, con un profundo diseño estético y emblema de lo artístico y artesanal.

 

Cerámicos, Porcelánicos y Gres en Barcelona

Suelos, fachadas y paredes, lucen con la elegancia de los materiales porcelánicos. Los suelos porcelánicos están formados de un material cerámico duro y homogéneo, prensado en seco y generalmente no esmaltado. Aunque su composición varía según el fabricante, suele fabricarse con diferentes proporciones de feldespatos, arcillas, caolines, arenas y algunos aditivos.

Existe una amplia gama de este tipo de suelos y los fabricantes invierten en innovación y creatividad para dotar al mercado de suelos elegantes y cálidos, a la vez que muy resistentes. Los suelos porcelánicos son versátiles y combinan a la perfección en estancias modernas y clásicas. Es fácil combinar estos suelos con cualquier estilo de decoración, así como en combinación con otros materiales.

Existen dos tipos de suelos porcelánicos:

Suelos porcelánicos no esmaltados

Tiene un nivel de absorción de agua extremadamente bajo. Se presenta tal como resulta de la cocción (gres porcelánico natural) o se pule para darle brillo y alisarlo. Puede presentar diseños en relieve que tienen fines decorativos y también para hacerlo antideslizante, en caso de suelos exteriores o locales industriales.

Suelos porcelánicos esmaltados

Tiene un nivel de absorción muy bajo de agua. La cara vista del suelo se recubre de un esmalte vitrificado monocolor o decorado. Su superficie y sus aristas son regulares y bien acabadas, excepto en aquellas baldosas prensadas en seco que tienen una intención de apariencia rústica. En el mercado predominan las formas cuadrada y rectangular, de medidas comprendidas entre 15 x15cm y 60 x120cm.

Mantenimiento:

Si en algo se caracterizan las plaquetas porcelánicas es por su baja porosidad, esto les confiere una resistencia al agua muy importante y simplifica mucho su mantenimiento. Estos suelos mantienen su aspecto muchos años, tanto en interiores como en exteriores.